Los alrededores de Yeste son un paraíso para los amantes del senderismo y la bicicleta. Ofrece tantas posibilidades que deberíamos recomendar una estancia de una semana para empaparnos y disfrutar a fondo del entorno.

La Microrreserva Cerro de Rala es uno de los relieves más abruptos y elevados de la zona, una zona de impactante belleza paisajística, con el macizo del Calar del Mundo como fondo, y las pintorescas aldeas serranas como el LLano de la Torre, Rala, El Cortijo de la Juliana, Jartos, Boche, Los Collados, Raspilla, etc.

Precisamente por las aldeas de Jartos y Boche, hay una preciosa ruta para BTT y senderismo que termina en el puente colgado sobre el río y nos da unas espectaculares vistas al embalse de la Fuensanta desde los Picos, junto a la Microrreserva del Cerro de Rala.

La ruta tiene dos posibles inicios a sólo 1 kilómetro de Yeste: uno en la aldea de Boche y otro en el paraje del Pinico, a pocos metros del cruce de la carretera de Yeste a Boche. Aquí describimos la que sale desde Boche.

Distancia total desde Boche: 19,4 kilómetros ida y vuelta

Tiempo aproximado: 3:30 horas

Dificultad: baja

Desde Boche ruta desciende hasta la aldea de Jartos por una pista forestal, entre olviares y zonas de cultivo, atravesando primero Boche de Abajo, las casas de Tejera –antiguo cortijo– después, un arroyuelo y llega después hasta los Pajareles, donde se inicia el tramo final hasta el puente colgado sobre el río Tus.

Este tramo final desde los Pajareles hasta llegar al puente colgado son apenas 2 kilómetros que zigzaguean bordeando los límites de la Microrreserva del Cerro de Rala, por pistas que avanzan rodeadas de vegetación.

Al final de la ruta se divisan los Picos, curiosas formaciones rocosas que dan nombre a este bello paraje y al cortijo que divisamos sobre los riscos.

La pasarela o puente colgado recibe el nombre de “Los Pajarales” o de “Llano de la Torre” y cuelga sobre el pantano de la Fuensanta. Recién remodelada en 2019, fue construida en 1935-1936 por el ingeniero Boetticher, discípulo del arquitecto Eiffel, con un único vano de 85 metros de luz entre las torres, más dos pequeños vanos adicionales en el estribo izquierdo con tablero de hormigón armado.

El puente era paso frecuentado a inicios de verano de segadores que se marchaban a la mancha albaceteña a echar temporada, el camino real de Yeste a Jartos para cruzar por el Puente y coger por el Llano de la Torre en camino de Torre Pedro que nos cruza hasta Ayna.